El brillo del oro no es metaforico en el final del 2024

El brillo del oro no es metaforico en el final del 2024
Photo by Edouard Dognin / Unsplash

En el convulso escenario global de 2024, las fuerzas económicas y políticas convergen para reformar y desafiar el sistema financiero internacional establecido, generando una creciente inestabilidad que repercute en cada rincón del mundo. La acumulación récord de oro por los bancos centrales, las tensiones de poder entre bloques como el BRICS y las potencias occidentales, y el cambio de liderazgo en los Estados Unidos y México son solo algunos de los factores que delinean un panorama incierto para los años venideros.

La Guerra en Ucrania: Un Conflicto No Resuelto

La invasión de Rusia a Ucrania, en su tercer año, ha dejado profundas heridas y ha reconfigurado alianzas internacionales. Para Occidente, esta guerra es un símbolo de resistencia contra las ambiciones imperialistas de Rusia; mientras tanto, para Moscú y sus aliados en el BRICS, representa la defensa de un orden multipolar, en el cual las potencias emergentes rechazan la hegemonía de EE.UU. y de la OTAN. Este conflicto ha intensificado las sanciones contra Rusia, provocando una dependencia cada vez mayor en el comercio con Asia, especialmente China e India. Las sanciones y la respuesta de Rusia de utilizar el oro como respaldo temporal del rublo evidencian una tendencia hacia la independencia económica y un rechazo al dólar como moneda de referencia.

BRICS: El Desafío Económico al Occidente

La reciente cumbre del BRICS reunió a líderes de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, quienes se comprometieron a fortalecer sus economías mediante una alternativa a las reservas en dólares. La propuesta de una moneda estable respaldada por oro, busca proporcionar una opción neutral en medio de un entorno financiero global cada vez más volátil. Para muchos analistas, esta iniciativa es una amenaza directa a la supremacía del dólar y el sistema financiero occidental, y aunque aún es incipiente, representa el interés de las potencias emergentes en un sistema menos dependiente de las instituciones financieras occidentales.

Las Elecciones en Estados Unidos: El Regreso de Trump

En noviembre de 2024, Donald Trump regresa al poder, marcando un cambio drástico en la política exterior de Estados Unidos. Durante su campaña, Trump prometió retirar las tropas de Ucrania, priorizar la inversión interna y retomar una postura aislacionista. Esto no solo afectará la ayuda militar a Ucrania, sino que podría desestabilizar la OTAN y alentar a otras potencias, como Rusia y China, a expandir su influencia en regiones previamente controladas por EE.UU. Esta reconfiguración podría inclinar el equilibrio de poder global hacia el BRICS, mientras que las relaciones de Estados Unidos con sus aliados tradicionales se encuentran en una etapa de incertidumbre y tensión.

El Conflicto en Palestina: Un Genocidio Silencioso

El conflicto entre Israel y Palestina ha escalado a niveles críticos, y voces alrededor del mundo califican los ataques de Israel sobre Gaza como genocidio. Las estrategias financieras de las potencias, y el conflicto en Gaza añade una capa de complejidad. Mientras los bancos centrales de países como Turquía y Arabia Saudita acumulan oro y fortalecen sus economías, la situación en Palestina parece desatendida por la comunidad internacional, a excepción de algunas condenas simbólicas. Sin embargo, las tensiones en Oriente Medio podrían desestabilizar aún más el mercado energético y financiero global, dada la influencia de esta región en el suministro de petróleo.

México: Claudia Sheinbaum y el Nuevo Rumbo Político

En México, la presidenta Claudia Sheinbaum inicia su mandato en un momento crítico para América Latina, una región que, al igual que el BRICS, busca mayor autonomía económica y soberanía. En su discurso inaugural, Sheinbaum destacó la importancia de fortalecer la cooperación regional y reducir la dependencia de Estados Unidos. Su administración ha anunciado una serie de reformas para aumentar la competitividad de México en el mercado global y diversificar sus socios comerciales, especialmente en Asia y América Latina. Este giro podría posicionar a México como un intermediario entre EE.UU. y el BRICS, convirtiéndose en un aliado estratégico tanto en el comercio como en la geopolítica.

La Adquisición Masiva de Oro por los Bancos Centrales

Desde los primeros meses de 2024, los bancos centrales alrededor del mundo han incrementado de manera notable sus reservas de oro, alcanzando una cifra récord de 483 toneladas en el primer semestre del año. Este comportamiento no es casual ni se trata de una tendencia pasajera; más bien, responde a una estrategia de diversificación de activos y, en muchos casos, a una medida preventiva en respuesta a la volatilidad e inestabilidad de los mercados financieros internacionales. El oro, considerado históricamente como un refugio seguro, proporciona una estabilidad que otros activos no pueden garantizar, especialmente en tiempos de incertidumbre económica y geopolítica.

El Banco Nacional de Polonia, el Banco de la Reserva de la India y el Banco Central de Turquía son algunos de los actores principales en esta tendencia de compra masiva. Sus acciones reflejan una desconfianza creciente en activos de reserva tradicionales como el dólar y el euro, debido a la incertidumbre provocada por políticas monetarias expansivas y sanciones económicas que afectan la confiabilidad de las divisas occidentales. Los bancos centrales están utilizando el oro como una "red de seguridad" para hacer frente a posibles crisis en el sistema financiero global, en un contexto donde las sanciones y restricciones económicas limitan las opciones de intercambio de muchos países.

El Rol de la Desdolarización en la Economía Emergente

La desdolarización se presenta como una respuesta de países emergentes y economías en desarrollo ante el uso de sanciones económicas por parte de Estados Unidos y sus aliados. Esta estrategia ha cobrado mayor relevancia debido a acciones como el congelamiento de activos rusos por un valor de 300,000 millones de euros. Frente a este tipo de medidas, países como China, India y Rusia están optando por reducir su dependencia en el dólar, prefiriendo aumentar sus reservas de oro como un activo de reserva que no está sujeto a las políticas de las potencias occidentales.

El proyecto de una moneda estable respaldada en oro impulsada por el grupo BRICS podría cambiar radicalmente el comercio internacional. En teoría, una moneda respaldada en oro proporcionaría una alternativa viable y neutral que permitiría a estos países intercambiar bienes y servicios sin depender del sistema financiero dominado por el dólar. Esta medida no solo representa una maniobra para eludir el dólar, sino que también podría disminuir la influencia económica de Estados Unidos y sus aliados en el comercio mundial. La implementación de esta moneda, sin embargo, enfrenta varios desafíos, desde la infraestructura tecnológica necesaria para sustentarla hasta la aceptación internacional, pero sus posibles implicaciones son vastas.

El Cambio de Estrategia de China

A diferencia de otros países, el Banco Popular de China ha detenido sus adquisiciones de oro en los últimos seis meses, manteniendo sus reservas estables en 2,264 toneladas. Esta decisión ha tenido un impacto significativo en la demanda global de oro, con una reducción de casi el 50% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este cambio de estrategia ha generado varias preguntas, pues mientras otros países se apresuran a acumular oro, China ha optado por no incrementar sus reservas.

La explicación detrás de esta pausa parece estar en un cambio de enfoque: el oro que el Banco Central de China hubiera adquirido ahora está disponible para el mercado doméstico, permitiendo que los hogares privados chinos accedan a él como una alternativa de inversión segura. En un contexto de volatilidad económica, esta medida refleja una estrategia orientada a fortalecer la economía doméstica y brindar a los ciudadanos una herramienta de ahorro que mantenga su valor en el tiempo. El gobierno chino parece reconocer que en tiempos de incertidumbre, el acceso a activos estables y seguros como el oro puede ser una forma de preservar el poder adquisitivo de su población.

Riesgos y Desafíos del Oro como Refugio

Aunque el oro ha demostrado ser un refugio seguro,  este metal también enfrenta riesgos en el contexto actual. La creciente demanda por parte de los bancos centrales ha generado un aumento en su valor, que alcanzó los 2,597 dólares por onza en 2024, pero este precio podría no mantenerse si las condiciones cambian. Si los inversores privados deciden vender oro de manera masiva para buscar liquidez en otras inversiones, el precio podría caer abruptamente, afectando los rendimientos de aquellos que han invertido en el metal como activo seguro.

Además, la preferencia institucional por el oro también revela una desconfianza en las criptomonedas, las cuales, a pesar de sus altos rendimientos, no han logrado convertirse en un activo de reserva confiable para los bancos centrales debido a su volatilidad y falta de regulación. A diferencia del oro, las criptomonedas carecen de la estabilidad que las instituciones financieras buscan en tiempos de crisis, y aunque representan una alternativa moderna, aún no tienen la aceptación ni la estabilidad necesaria para reemplazar al oro en el sistema financiero internacional.

Contexto Histórico y Perspectiva de Crisis

Este fenómeno en un contexto histórico, recordando que antes de los años 70, cuando se abandonó el patrón oro, los bancos centrales mantenían una relación muy diferente con el metal precioso. Tras la crisis financiera de 2008, sin embargo, comenzó un ciclo de acumulación de oro impulsado por las preocupaciones sobre la devaluación de las divisas y la necesidad de diversificar las reservas internacionales. Esta tendencia ha sido intensificada por los recientes conflictos geopolíticos, como la guerra en Ucrania y las sanciones contra Rusia, los cuales han reforzado la percepción de que el oro es un activo menos vulnerable a las fluctuaciones políticas y económicas.

La acumulación de oro por parte de los bancos centrales es vista como una señal de alerta ante una posible crisis global de deuda y una pérdida de confianza en las monedas fiduciarias, como el dólar y el euro. Analistas como Nouriel Roubini, advierten que esta crisis de deuda podría desencadenar un colapso financiero sin precedentes, en el cual los países con reservas en oro podrían estar mejor preparados para enfrentar las turbulencias económicas, mientras que aquellos sin acceso a activos de refugio enfrentarían graves consecuencias.

Consecuencias para las Economías y el Futuro del Sistema Financiero

Las acciones de los bancos centrales reflejan un cambio de paradigma en la forma en que las economías emergentes se preparan para el futuro. La acumulación de oro y el proyecto de desdolarización podrían llevar a un mundo financiero dividido, donde los países con reservas de oro o activos respaldados en metales preciosos disfrutarían de una mayor estabilidad, mientras que otros se enfrentarían a la devaluación de sus monedas y a la inestabilidad económica.

Esta disparidad podría generar nuevas tensiones y agravar las desigualdades globales. El colapso del poder del dólar tendría efectos devastadores en las economías más vulnerables, las cuales no cuentan con los recursos para respaldar sus monedas con activos seguros. En caso de que el dólar pierda su valor como reserva mundial, muchos países podrían enfrentar un éxodo de capitales y un aumento de la pobreza, lo cual intensificaría los flujos migratorios y generaría nuevas crisis humanitarias.

Personalmente creo que el enfoque hacia el oro por parte de los bancos centrales no es solo una medida de precaución, sino una reacción a un sistema financiero global que se tambalea. La tendencia a acumular oro refleja una creciente desconfianza en las monedas fiduciarias y un deseo de autonomía económica en un mundo cada vez más inestable. Las implicaciones de este cambio podrían marcar el inicio de una era en la cual el oro vuelve a ocupar un lugar central en el sistema financiero, y donde el orden geopolítico experimentará una reconfiguración sin precedentes.

Bibiliografia

Tensiones geopolíticas y conflictos internacionales:

Políticas económicas de Estados Unidos:

Conflictos en Oriente Medio:

  • El País. "La ofensiva arancelaria de Trump". Este artículo discute las políticas comerciales de Estados Unidos y su impacto en las relaciones internacionales, incluyendo las tensiones en Oriente Medio.

Política y economía en México:

Acumulación de oro por bancos centrales: